Tiene los ojos más bonito que has visto y verás jamás, eso es una verdad y tienes que aceptarla. Cuando la ves sabes que jamás se fijaría en ti. Poco a poco ves que deseas que lo haga. Tienes que dar lo mejor de ti...tus mejores palabras, y correr a por donuts si hace falta. Y te abres a ella, y parece que al final esa chica quizás sí se fije en ti. Y compusiste canciones que no acabaste debidamente porque estabas demasiado ocupado siendo feliz. Y escribiste palabras de amor. Te perdías en vuestras bromas, y te encontrabas en vuestros abrazos. Juras que fuiste feliz, y te creo. Asociabas la niebla a cosas buenas, y eso sólo podía ser porque allí por primera vez descubriste que no os besabais bien, y también descubriste que hay cosas que se aprenden muy rápido. Soñasteis con la capital francesa, soñasteis mucho, no hicisteis tanto, pero lo que compartisteis fue genial. Ahora te preguntas si valió la pena, hubo un momento en que dejaste de darle todo lo que tenías que darle. Y actuaste mal, varias veces, fatal. Estás eternamente agradecido y te sientes afortunado por lo que te dio ¿verdad? Quizás nunca la mereciste, o, hay demasiados quizás...Sé que lo sientes pero no es suficiente, lo siento chico, te has pasado. Y no me digas que quieres que sea feliz, ya lo sé, ya lo supongo vaya, pero esas palabras suenan típicas y...no arreglan nada, no arreglan nada.
No duró demasiado, pero bonito fue, intenso a ratos, y verdad seguro. Te llegaste a sentir más en casa que en tu propia casa. Aguanta esta noche, para saber minimamente lo que está viviendo, y mañana tú verás chaval.
un baby.
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