sábado, 30 de abril de 2011

Pues vaya sábado

Sábados grises presididos por mediocridad. Un tweet gracioso y pocas cosas que cantar. La guitarra en el suelo, bien colocada, entre un montón de cosas desordenadas que conforman una habitación.La guitarra en el suelo, bien colocada, preguntaría si pudiera el por qué de que hoy no la hayan acariciado, ni un acorde de buenos días. Alguien se ha asomado por la ventana, comprobando que el mundo seguía ahí fuera, pero no sabía muy bien hacia donde mirar, supongo que ha visto las mismas cosas de siempre. A veces miras algo que has visto un millón de veces y descubres algo nuevo en ello, pero no creo que hoy sea una de esas veces. También puede pasar al contrario, suele ser miopía.

Los días grises son necesarios, supongo que son esos los que te obligan a colorear, como si fuesen uno de esos libros para niños pequeños, tú tienes el poder de convertirlos en lo que quieras. Dicho esto a veces no deseas nada más que dejar el librito en la mesa y pintar otro día, o que se pudran en incoloridad, qué más da.

Un sabio cita a Confucio: “Sólo el cambio perdura” y en realidad eso es de Heráclito, pero la frase me gusta igual.

Dudo que en este momento haya algo mejor que reír, quizás decir algo que provoque risa en los demás. Siempre he pensado que la vida sin música estaría vacía, hoy por primera vez reflexiono sobre esto y pongo el humor a la par que la música y por delante del fútbol, sí amigos, abrid los ojos. En realidad el martes que viene confirmaré si el fútbol es importante o no para mí en estos momentos. ¿Interesado de mierda? Quizás. ¿Egocéntrico? Seguro. ¿Cabrón? No lo creo, de verdad que no lo creo, quizás egoísta, despreocupado, o un poco inútil, pero no cabrón.

Y se ha ido, y es que igual que viene se va, y hace un rato un sábado aburridísimo era una excusa perfecta para hablar, y ahora ya no hay excusas que valgan, y lo mejor es pensar que mañana no me quedaré sin colorear.

lunes, 25 de abril de 2011

Desestructura

No entraba en facebook desde el verano del 69 en massachusets, tramaba mentiras piadosas con sus amigos mientras bebía lambrusco, acompañado de la pesadez y la tristeza de un día gris, y de la luz de su sentido del humor, para compensar. Las impresiones de un amigo podían provocarle una momentánea alegría, que no venía nada mal. Insultar le gustaba, en especial decir “hijo de puta”, aunque pudiese sonar algo fuerte. Disfrutaba de pequeñas cosas, sin embargo las grandes eran las que le provocaban dolor en ese momento. Sabía que la frase anterior podía mal interpretarse, y no le importaba demasiado. Cuando se quiso dar cuenta llevaba 10 minutos escuchando anuncios eróticos en la tele, no fue difícil optar por poner algo de música, una canción de Indie, con tono despreocupado, voz femenina, no tenía ni idea de quién era la cantante o la canción, pero era apropiada para el momento. Amaba a Berto Romero, por encima de muchas cosas, por encima del sofá en ese preciso instante. Le gustaba ir en tren, en especial le encantaba ir en uno de esos trenes de alta velocidad mientas se dormía lentamente en una canción tranquila, sentía el mundo pasar a toda velocidad, mientras él permanecía inmóvil. No le gustaba sufrir, no era tonto, al menos no tanto. Estaba seguro que la vida no era justa, no podía quejarse de como le había ido, aunque consideraba que la suerte había hecho más que él. Deseaba felicidad para algunas personas, sin embargo no se la proporcionaba. No se consideraba buena persona, ni mala, se encantaba en algunas cosas, y se odiaba en otras, a veces se encantaba y se odiaba por lo mismo, dependiendo del momento.

Dormir le encantaba, pero siempre encontraba alguna excusa para alargar el día...eso es un buen síntoma, ¿no?

viernes, 22 de abril de 2011

Nubes


Me disponía a tomar el sol acostado al lado de la piscina, con mis gafas y mi bañador llamativo, que quizás fueron el origen de la pregunta de mi primo pequeño, "vas de guay?", pregunta que inauguraba una tarde de viernes que sabía a domingo.
Mis planes enseguida fueron desbaratados por culpa de las nubes, nubes que trajeron la inspiración.

Me he quedado absorto mirándolas, sus formas cambiantes y cómo se mezclan entre ellas creando belleza. Me gusta tener la capacidad de admirar estas cosas.
El sol de vez en cuando se asoma con aspecto de luna, o quizás me lo parece a mí porque me gusta más el satélite, no lo sé.
Mi hermano, más activo que yo, siempre, busca bichos debajo de las piedras, y los encuentra, a mí no me gustan los bichos, a mí me gustan las nubes.

En el momento en el que he decidido escribir esto he renunciado a seguir mirando el cielo, y seguramente a caer dormido y sumirme en un montón de sueños que quizás me llevarían a una felicidad absoluta.
A veces tienes que renunciar a cosas para llevar a cabo otras, de hecho eso es lo que hacemos todo el tiempo, decidir, elegir y por tanto, renunciar.

miércoles, 20 de abril de 2011

Caos Nocturno

¿Escribo?

Estoy en una situación algo extraña, y en un estado de aturdimiento mental importante, llevo horas con la mirada caída, enganchado a las redes sociales, leyendo poesía moderna en forma de blog, discutiendo cosas importantes y no tan importantes...extrañamente pasota con el fútbol, cuando vienen 4 “derbis” este mes, ya llegará el momento.

Me voy a la cama...el sofá no es lugar para estar a las 2:14 de la mañana, al menos no hoy.

Y en la cama me imagino mundos paralelos, otros universos, cosas que no era capaz de imaginar hasta hace nada, siempre soñaba despierto siguiendo las reglas de la realidad, siempre he sido bastante admirador de la realidad, creo. Me suelen gustar más las películas que tratan temas reales, quizás menos sorprendentes...que películas de fantasía o ciencia ficción, aunque siempre hay excepciones...El caso es que estoy aprendiendo a imaginar cosas imposibles. La primera vez que escuché “me gustaría que no existiese el tiempo” no fue hace tanto, y no me entraba en la cabeza, me sigue costando, sin tiempo...no puedo entender nada...un mundo sin tiempo es imposible para mi cabeza, aunque con irrealidades más sencillas sí que me estoy atreviendo.

Pero he parado el viaje irreal de mis neuronas para volver a la realidad y escribir lo que realmente está pasando, que no es lo que está imaginando mi cabeza, lo que realmente pasa es que mi cabeza está imaginando, sólo eso, ¿qué decepción no?

Y ¿qué hago con mi vida? Que pregunta para hacerse a estas horas...no lo sé, ni muchos otros, pero no es excusa, tampoco me importa. No quiero ser común, no sé si lo soy, pero no es algo que quiera, me gusta sentirme identificado con gente,eso esta claro, pero no quiero ser común.

¿Qué es el feeling? Pocos lo sabríamos explicar, pero sabemos cuando lo sentimos, como un orgasmo.

Mañana puedo dormir todo lo que quiera, lo agradezco un montón, es mucho mejor que ir a dormir pensando.. “como mucho dormiré X horas...”eso es horrible. No horrible como un tsunami o Salvame deluxe, pero ya sabes...jode.

Que vida esta...me apetecía meter esta frase que no dice nada.

Me gusta pensar que soy especial, ¿espacial? He leído hoy ese término, pero es muy personal, no seré tan grosero de apoderarme de él, diré especial, pero si yo soy especial, por algunas cosas, que yo sé que hago o que digo o que creo, todo el mundo debe serlo, porque ellos también tendrán sus cosas...entonces nadie es especial, o todos lo somos, ¿es lo mismo? Algunos lo serán más que otros...espero. No me gusta la igualdad, nunca me ha gustado, lo siento comunistas, no me gusta, nadie es igual. No quiero que se mueran niños de hambre, no tiene nada que ver con eso, solo que hay diferencias, por todos los lados, entre todas las cosas, nada es igual.

¿Escribo?

No seguiré mucho, el sueño viene...y me acabo de acordar que hace media hora ha empezado un torneo gratuito de poker...maldita sea, me hubiese venido bien, aunque quizás no hubiese escrito esto, así que mira...No hay mal que por bien no venga...Ahora How I met sería un buen previo para mis sueños, sueños que con casi total seguridad mañana no recordaré, así que será como si no hubiesen existido...¿o no? Esos segundos en los que viaje por lo que sea que mi cabeza invente para mi esta noche, quizás será algo único e irrepetible, imposible de recordar, algo que no habrá existido, una vez haya existido...¿complicado?

Lo dejo aquí, nunca he escrito nada de más de 3 o 4 hojas,¿verdad? No tengo la disciplina, o simplemente mis ideas son bonitas pero efímeras...quizás sea eso...

buenas noches

...


Quiero escribir. Pensaba que hacerlo me alejaría de la oprimente realidad, que es difícil y delicada, pero lo cierto es que no puedo. No se me ocurre nada, creo que no tengo espacio en mi cabeza ahora mismo para crear nada, y menos para hablar sobre cosas reales.

Un elefante rosa sería un buen comienzo, quizás drogas, o dejémoslo en alcohol, y música, tranquila, nada de fiesta, pero eso sería crear, y hoy no puedo.

Tengo una guitarra a mi lado y no me dice nada, ni el fútbol en la tele, quizás si hay alcohol en la nevera lo agradeceré, pero no creo que solucione nada, porque hoy ya me he despertado, y eso es justo lo que no quería.

No es que esté deprimido ni nada, pero hay días en los que no estás preparado para vivir, ya sea por angustia, tristeza o simple aburrimiento.

Me gusta posponer las cosas, algunas son demasiado serias para hacerlo, pero a la vez requieren de tiempo para analizarlas y actuar, otras son más simples o agradables, o simplemente no te importan. Seguramente por eso no me gusta implicarme mucho en la mayoría de ellas, es más cómodo.

No quiero decir que no me importe nada, porque si no no estaría escribiendo esto, es necesario que te importen cosas, que te hagan sentir vivo, tanto en los momentos buenos como en los malos, yo prefiero los buenos, y cuando vienen malos, los prefiero con humor.

En cualquier caso por mucho que escribo no consigo deshacerme de la realidad, un gol de Piqué me lo recuerda, por si se me había olvidado. La realidad está aquí y hoy no es mi día.

Cosas sin sentido

Me gustan las cosas sin sentido, sin una finalidad. El arte, ¿para qué sirve? No tiene ninguna utilidad en un principio, pero mucha gente, o al menos yo, no podría vivir sin él.

Así que cosas sin sentido, dibujar en una clase aburrida, o escribir, plasmar pensamientos, sentimientos o deseos en un papel, o en una melodía, no creo que sea una pérdida de tiempo.

Quizás mis canciones sean escuchadas por 10 o 15 personas en toda mi vida, quizás los dibujos que está haciendo la chica que esta a mi lado acaben arrugados y llenos de polvo en un cajón, pero si no lo hiciésemos quizás nos volveríamos locos, al menos yo, no sería yo si no lo hiciese, si no estuviese escribiendo esto ahora.

Cosas sin sentido, aullar, gritar, cantar, follar, bailar, intentar meter un papel en una papelera, chutar un balón a la red, tocar la guitarra, ligar una noche de sábado, enamorarte una mañana de domingo, coger un tren sin importarte el destino, cosas sin sentido, ¿aún lo creo? ¿Qué haría sin eso? De hecho es eso lo que da sentido.

Cuando trabaje será para hacer esas cosas, a parte de comer, pero mi supervivencia no valdría la pena sin todas esas cosas. Voy a hacer cosas sin sentido, a seguir haciéndolas, me lo prometo.

martes, 19 de abril de 2011

Podría escribir mis parras en un blog, ¿por qué no? No hago daño a nadie, haciendo lo del blog digo, así que quizás lo haga, venga va, lo hago.
La primera duda que me asalta es, ¿publicaré sólo lo que escriba nuevo? La primera respuesta es que no, aprovecharé todo lo que ya he colgado previamente o cosas que haya escrito y no haya colgado. Reciclando lo que hago o ley del mínimo esfuerzo, me gusta eso del mínimo esfuerzo, aunque algún día tendré que cambiarlo, o ser un genio que pueda vivir con eso, pero me da que no...

Gracias a todos los que me han animado a crearme el blog, sin vosotros mi vida no tendría sentido.
Es coña, pero gracias igualmente.