lunes, 25 de abril de 2011

Desestructura

No entraba en facebook desde el verano del 69 en massachusets, tramaba mentiras piadosas con sus amigos mientras bebía lambrusco, acompañado de la pesadez y la tristeza de un día gris, y de la luz de su sentido del humor, para compensar. Las impresiones de un amigo podían provocarle una momentánea alegría, que no venía nada mal. Insultar le gustaba, en especial decir “hijo de puta”, aunque pudiese sonar algo fuerte. Disfrutaba de pequeñas cosas, sin embargo las grandes eran las que le provocaban dolor en ese momento. Sabía que la frase anterior podía mal interpretarse, y no le importaba demasiado. Cuando se quiso dar cuenta llevaba 10 minutos escuchando anuncios eróticos en la tele, no fue difícil optar por poner algo de música, una canción de Indie, con tono despreocupado, voz femenina, no tenía ni idea de quién era la cantante o la canción, pero era apropiada para el momento. Amaba a Berto Romero, por encima de muchas cosas, por encima del sofá en ese preciso instante. Le gustaba ir en tren, en especial le encantaba ir en uno de esos trenes de alta velocidad mientas se dormía lentamente en una canción tranquila, sentía el mundo pasar a toda velocidad, mientras él permanecía inmóvil. No le gustaba sufrir, no era tonto, al menos no tanto. Estaba seguro que la vida no era justa, no podía quejarse de como le había ido, aunque consideraba que la suerte había hecho más que él. Deseaba felicidad para algunas personas, sin embargo no se la proporcionaba. No se consideraba buena persona, ni mala, se encantaba en algunas cosas, y se odiaba en otras, a veces se encantaba y se odiaba por lo mismo, dependiendo del momento.

Dormir le encantaba, pero siempre encontraba alguna excusa para alargar el día...eso es un buen síntoma, ¿no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario